En este post, nos hemos centrado en el
análisis del capítulo 1 del libro "Estrategias de lectura" de Isabel
Solé, de 1998.
Primeramente
presentaremos un resumen del mencionado capítulo, que comienza con el concepto
de lectura, continúa definiendo en qué debería consistir este proceso lector, y
termina hablándonos de la lectura en la escuela
Capitulo 1- EL RETO DE LA LECTURA
¿Qué es leer?
Leer
requiere la presencia de un lector activo que procesa el texto. Por otro lado, siempre debe de existir un objetivo para la
lectura, ya que la podemos emplear para distintas finalidades. Por lo tanto, el
significado del texto dependerá de las
ideas previas del lector y sus objetivos de lectura.
Además, el lector deberá de conocer las diferentes
estructuras textuales para una correcta comprensión de la información. Se puede
afirmar que leer es una experiencia compleja.
El
proceso de lectura. Una perspectiva interactiva.
El modelo interactivo
Se han
aplicado dos modelos opuestos para explicar el proceso de una manera jerárquica:
el ascendente, “bottom up”, y el descendente, o “top down.
El primero propone al lector comenzar desde los
elementos que configuran el texto de menor a mayor complejidad, es decir
empezar con las letras, seguir con las palabras y finalizar con las frases para
la correcta comprensión del texto.
El segundo planteo lo contrario, el lector
comenzaría haciendo uso de su conocimiento previo y establecería hipótesis para
después poder verificarlas tras la lectura.
El modelo interactivo propone la
coexistencia de los dos modelos anteriores, ya que los alumnos necesitan poseer habilidades de
decodificación, pero también estrategias comprensivas.
Predecir, verificar, construir una
interpretación
Hacemos
predicciones sobre cualquier tipo de texto a partir de la información que nos
proporciona, de la situación o contexto de la lectura y de nuestro
conocimiento.
La
autora propone que proceso de predicción y el control de
la comprensión no está en manos del lector, sino de su profesora.
La lectura es, por tanto, un proceso
constante de elaboración y verificación de predicciones.
El proceso de inferencia se inicia
antes de la lectura propiamente dicha, hay que enseñar a interpretar títulos,
subtítulos, epígrafes, negritas, esquemas, ilustraciones…ya que esto, junto con
los objetivos de la lectura, nos permitirá formular hipótesis iniciales. En
función de esos objetivos se desarrollan estrategias de lectura básicas que
implican según Brown, Campione y Day (1981):
·
Supresión
de las informaciones triviales, repetitivas o redundantes.
·
La
sustitución de conceptos, hechos o acciones por un concepto supra ordinado que
los incluya.
·
La creación o selección de una frase temática
para la parte del texto más relacionada con los objetivos de la lectura.
Isabel Solé propone que la base de la comprensión de la lectura se realiza
durante el mismo proceso como producto de la interacción entre objetivos,
conocimiento previo del lector e información aportada por el texto.
La lectura en la escuela
Enseñar a
leer en las escuelas es un reto esencial. Según datos extraídos de El País (5/11/90), el 4’18%
de la población española era analfabeta. En cuanto a “analfabetismo funcional”
(“saben” leer, pero no pueden utilizar de forma autónoma la lectura e sus
relaciones sociales, el problema afectaba, en la misma fecha, a más de 10
millones de personas, la mayoría entre los 18 y los 35 años.
Según la autora, todo esto, permite
“cuestionar algunas de las prácticas educativas que se llevan a término en
nuestra sociedad en relación con la alfabetización”. Solé señala que el tema no
presenta la adecuada valoración por parte del equipo de profesores, ya que
hablar solo de métodos no es suficiente.
La lectura, un objeto de conocimiento
Leer y escribir se suelen plantear
como objetivos prioritarios de la educación primaria, cuando los objetivos que
plantea el DCB y Disseny Curricular trascienden absolutamente la idea de
habilidades (relectura, inferencias, elaboración de opiniones propias) que se
puedan conseguir sólo en ese primer ciclo.
Algunos autores como Isabel Solé,
entre ellos, investigaron diferentes contextos para saber lo que pasa en las
aulas de educación primaria en relación a la lectura. En general el protocolo
del aula se basa en que diferentes alumnos van leyendo un texto, cada uno un
fragmento, mientras los demás “siguen” la lectura. Cuando algún lector comete
un error, suele ser corregido por el docente. Tras la lectura, se formulan
preguntas relativas al contenido y finalmente se elabora alguna actividad
relacionada con el texto.
Isabel realiza algunos comentarios
sobre este protocolo:
·
No sólo afecta al primer ciclo de primaria,
sino también al segundo.
·
El material didáctico suele coincidir con
esta “protocolización” de la lectura en el aula.
·
La secuencia no incluye estrategias de comprensión
de textos.
La autora afirma que una vez superada
la descodificación, que con el uso de los “protocolos” no se enseña a
“comprender”, ya que se basa en el producto final de la lectura y no en su
proceso. Según investigaciones, las intervenciones destinadas a evaluar el
resultado de la lectura son muy superiores a las destinadas a enseñar.
Opinión personal del capítulo
Tras la lectura del capítulo, me
gustaría decir que estoy a favor de todas las estrategias para favorecer la
lectura que plantea la autora.
En primer lugar, me gustaría decir
que considero muy importante afrontar la lectura tal y como dice Solé, es
imprescindible que los alumnos conozcan los objetivos de su lectura y que
utilicen sus conocimientos previos para poder realizar ciertas predicciones
sobre el texto, predecir nos permite aventurarnos a lo que puede ocurrir en el
texto y cuando lo verificamos, es cuando realmente podemos realizar una
interpretación y comprenderlo. Por otro lado, cuanta más información posean los
alumnos sobre el texto, mejor será su comprensión y su descodificación de los
elementos.
En segundo lugar, estoy a favor de
una metodología más interactiva, donde se produce un modelo constructivista, en
la cual, el alumno es protagonista de
sus propios aprendizajes y es el docente, el que hace de guía. Además, creo que los docentes juegan un papel
muy importante en fomentar buenos hábitos de lectura entre sus alumnos y deben
de proporcionar las estrategias adecuadas para facilitar la comprensión de la
lectura.
En tercer lugar, también considero un
aspecto muy importante como futura docente, proporcionar a los alumnos los
recursos necesarios para que puedan ir aprendiendo con su propia experiencia,
ya que lo más significativo es el proceso que se sigue en el transcurso de la
lectura y no solo el resultado final, considero que la principal finalidad es
enseñar a los alumnos a “comprender” la lectura y no en la evaluación final.
Finalmente decir que la lectura es un elemento esencial para los alumnos, ya que
es un proceso muy complejo, donde intervienen muchos procesos mentales y que
permite a los alumnos predecir, aclarar dudas, activar el conocimiento
previo, establecer objetivos previos a
la lectura, interpretar, resumir, sintetizar….por lo tanto, hay que darle la
importancia que se merece y buscar nuevos métodos que puedan combatir los “protocolos” en las aulas, vivimos en una
sociedad en constante cambio, por eso no veo factible usar siempre el mismo protocolo,
ya que en las aulas hay muchos alumnos, cada uno de ellos con necesidades
distintas y por lo tanto debe de ser la escuela la que se adapte a estas
necesidades.